Brillante y luminoso, radiante y deslumbrante. Un rostro que simplemente brilla e irradia belleza y frescura natural requiere mantenimiento, tanto por dentro como por fuera. Mantienes tus dientes, tu coche, tu ropa, tus amigos. Es absolutamente necesario que hagas lo mismo con tu piel. Una piel radiante y vibrante requiere tanto una rutina regular de cuidado de la piel como un estilo de vida saludable. ADENTRO Cuando la enfermedad se manifiesta internamente, la piel casi siempre refleja y señala la enfermedad interna. Ciertamente, quienes luchan contra una enfermedad crónica debilitante rara vez tienen una piel radiante. Por ejemplo, pocas cosas destruyen tanto un rostro como fumar, el alcohol (y el sol). Por el contrario, cuidar un entorno interno saludable contribuye a un rostro resplandeciente y brillante. Mantenerse hidratado internamente también ayuda a mantener una piel fresca, hidratada y radiante.
Evitando el exceso de azúcar (ver blog sobre azúcar ) y la basura de siempre que conocemos muy bien. Esto me recuerda a los osos. Puedes saber si un oso es un oso de basurero o un oso de dieta natural. Los osos de los basureros rara vez tienen un pelaje grueso y rico, mientras que los osos salmón y bayas tienen un pelaje lustroso, saludable y brillante.
Basura por dentro, basura por fuera.
AFUERA Si bien algunos tienen rutinas extensas de cuidado de la piel (muchas culturas asiáticas tienen un proceso de 11 pasos, por ejemplo), lo importante es aplicar los productos correctos en el orden correcto.
Comienza limpiando y exfoliando . Limpia los percebes y la suciedad para permitir que las lociones, sueros y cremas actúen. Ya sea que utilices un exfoliante físico o químico suave, sé suave pero definitivo. No seas demasiado agresivo, pero elimina las células muertas de la piel que pueden bloquear la eficacia de tu suero, loción o crema y obstruir los poros. Ahora aplique su suero que, como concentrado, realmente puede penetrar las capas externas de la piel (estrato córneo) y preparar el camino para su crema de noche o loción de día . Asegúrese siempre de utilizar un humectante potente CON un humectante (que retiene la humedad). No combinar tu crema hidratante con un buen humectante como el ácido hialurónico o los Omega 3, es como pescar sin anzuelo.
Entonces, recuerda, si no puedes “soportar” mirarte la cara en el espejo… deshazte de los hábitos poco saludables y agrega ingredientes saludables tanto en tu boca como en tu piel.